La vida del motor de un vehículo depende en gran parte de cómo se le cuide y se conduzca, es tan prioritario que los fabricantes incluyen el manual de usuario para explicar las diversas especificaciones de las diferentes partes que componen al coche y su máquina. Siguiendo tan solo algunos consejos, es mucho lo que puede hacerse por el bien del coche:
Reemplazar cables y bujías: los cables de las bujías van desde ellas hasta el distribuidor, son necesarios para la conducción de la electricidad; en ellos se genera el proceso que enciende la mezcla de la combustión en la cámara. Cuando están muy añejos, lo más probable es que el coche no encienda o se esfuerce demasiado el motor para que logre la combustión.
Acelerar y detener con cautela: aun teniendo el coche mucha fuerza para correr, no es provechoso cuando no se mantiene un ritmo constante. Las paradas y arranques de repente, van desgastando el motor, a mediano plazo deja de funcionar correctamente, lo cual va creando nuevas averías. Lo más prudente es procurar que la velocidad sea constante, así se evita el desgaste y mejorar el rendimiento del combustible.
Cambiar el filtro del combustible: con frecuencia el filtro de la gasolina se pasa por alto hasta que el olor a combustible se hace perceptible, en ese momento es cuando ya muy evidente que hay problemas. A veces la gasolina se llena de partículas y otras impurezas que pueden perjudicar al motor, al reemplazarse el filtro fluirá mejor el combustible y la máquina lo quemará con mayor facilidad.
Mantener una buena ventilación para el motor: es primordial para la máquina tener una buena ventilación para que la combustión sea eficiente, y es esa la función del filtro de aire, evitando que entren impurezas como partículas, polvo e insectos. Es aconsejable que se cambie regularmente para que no se sature.
Revisar que no existan goteras: en ocasiones hasta el olor puede delatar la presencia de goteras, otra forma infalible es revisando el piso en busca de manchas. La mayoría de las veces las fugas son de refrigerante o aceite, que podrían ser ocasionadas por fallos de las juntas, gomas, mangueras, etc., estas con el pasar del tiempo y el uso se agrietan. Cuando esto ocurre el nivel del líquido que se escurre baja más de lo habitual y si no se repara el motor se desgasta.
Cuando se desatienden las necesidades y cuidados de la máquina se acorta su vida útil, de ser así podría reemplazarla con un motor audi segunda mano, Jeep, Toyota, o la marca que corresponda a su coche. Los motores de desguaces son mucho más baratos que en cualquier otro tipo de tiendas y también suelen tener garantías, utilizando una central de desguace especializada vía online será muy fácil buscarlo.